El otro día cuando fui a Madrid y estuve con mis amigos en
el centro comercial más impresionante de la capital, os lo aseguro era uncentro comercial enorme con más de mil tiendas, bueno a lo mejor exagero un
poquito, pero era muy grande.
Os hablo sin dejar lugar a dudas del centro comercial
Xanadú, el centro comercial por excelencia de Madrid.
Tiene de todo lo que una persona se pueda imaginar, bingo,
ruleta, restaurantes, una pista de karts, mogollón de tiendas y muchas más
cosas que si me pusiese a enumerar perdería toda la tarde.
Asique me gustaría haceros un resumen de mi día allí para
que así podáis saber lo que se puede hacer allí para aprovechar bien un día sin
salir de un centro comercial, casi ni para fumar.
Lo primero que hicimos fue ir al mítico restaurante del GTA
San Andreas, el Taco Bell, y sí, el aspecto es parecido al del juego, sobre
todo con el tema de la comida grasienta que hace que cuando salgas de allí te
sientas mucho más gordo de lo que has entrado.
Luego una vez estábamos a punto de reventar nos fuimos a ver
tiendas como las niñas, pero ya que estábamos allí había que comprar algo, por
quedar un poco bien decidimos entrar en Desigual, que a mi madre le encanta la ropa que venden allí, y no entiendo por que.
Entramos en el sport nova para ver si tenían las Adidas Copa
Mundial, y el precio desorbitado al que las tendrían.
Luego fuimos a ver que más había por ahí, y entramos en una
tienda con una dependienta majísima, y con muy buena "presencia", asique
simplemente entramos para ver lo que había pero sin ninguna intención de
comprar.
Ya cuando estábamos cansados de ver trapos decidimos ir a esquiar en la pista que, si, una pista de equí en el interior del centro comercial, para hacer un poco el cabestro, y yo humillar un poco a mis amigos.
Cuando acabamos las vueltas que nos dejaron fuimos otra vez
a los restaurantes haciendo varias paradas en varios de ellos.
El primero fue el 100 montaditos a por una jarra de cerveza
y un plato de patatas.
La verdad que el 100 montaditos para abrir el apetito está
bastante bien, pero para cenar decidimos entrar en un restaurante que solo con
el nombre nos llamó la atención.
Aunque estuvimos mirando otros tantos, al final nos
decidimos por uno que solo con el eslogan nos bastaba para saber que íbamos a
cenar bien, el eslogan era donde come 1 comen 4, suficiente para convencerme.
Total entramos y comimos cada uno por seis, hasta que
tuvimos que perder un agujero del cinturón, algo normal después de comer una
pizza como el tapacubos de un camión.
Asique después de pasar un día comiendo y haciendo eltonto por el centro comercial, decidimos que ya era hora de ir a casa para hacer una digestión un poco pesada.
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